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Un ataque suicida en un centro educativo de Kabul deja 48 muertos

  • El atentado tuvo lugar en un barrio de mayoria chií, por lo que se cree que esté detrás el Daesh

Al menos 48 personas murieron luego de que un atacante suicida se volara en el interior de un centro educativo de la capital de Afganistán, Kabul. Al menos otras 67 personas resultaron heridas, algunas de ellas de gravedad, en un ataque ocurrido en el barrio Dasht-e Bartshi, área con predominancia chií de la ciudad, afirmó un portavoz del Ministerio de Salud afgano.

La mayoría de las víctimas del atentado son estudiantes de un centro que imparte asignaturas como matemáticas, química y física para graduados de la escuela secundaria que están estudiando para acceder a la universidad.

Las fuerzas de seguridad afganas sufren 40 bajas tras una razia talibán al norte del país

Ninguna agrupación terrorista se adjudicó la responsabilidad por el atentado. Sin embargo, el grupo yihadista Daesh suele lanzar frecuentemente ataques contra minorías chíies en Afganistán. Desde enero se han registrado en la capital afgana al menos 16 atentados con un balance de más de 240 muertos.

La jornada resultó especialmente sangrienta en Afganistán, ya que en la provincia de Baghlan, al norte del país, se registró además la muerte de al menos 40 miembros de las fuerzas de seguridad, entre ellos policías, en un ataque de talibanes.

Los milicianos atacaron al menos tres puestos de control y una base militar durante la noche, destruyendo todas las instalaciones militares, señaló un miembro del Consejo Provincial. Un portavoz talibán se adjudicó la responsabilidad del ataque. A la vez, los talibanes aseguraron que no fueron 40 sino 72 los miembros de las fuerzas de seguridad afganas que murieron.

En los últimos meses los talibanes están realizando ataques cada vez de mayor envergadura contra bases militares y puestos de control de las fuerzas de seguridad. El martes atacaron una base militar en el noroeste de la provincia Fariab y al menos 14 soldados murieron y 29 resultaron heridos.

Según fuentes castrenses, los talibanes controlan casi el 14% del país, pero combaten en otro 30%. Mientras tanto, los talibanes anunciaron mediante un comunicado que dejarán de garantizar la seguridad de los miembros del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en el país afgano. Este grupo de religiosos extremistas acusan al CICR de no haber cumplido con sus obligaciones de apoyar a miembros de su grupo que permanecen presos en una prisión en Kabul.

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