La cúpula política y militar de Israel cometió "amplios y graves" fallos durante la contienda dirigida contra la milicia chiíta Hizbollah en Líbano hace dos veranos (boreales), concluyó el miércoles la comisión oficial de investigación sobre la guerra, en la que murieron unas 1.200 personas.

El presidente de la comisión, el juez retirado Eliyahu Winograd, estimó al presentar su informe final de resultados en Jerusalén que Israel, pese a su superioridad militar, no fue capaz de ganar la guerra que discurrió entre el 12 de julio y el 14 de agosto de 2006.

"Hemos encontrado graves fallos en el proceso de decisión de la cúpula política y militar", dijo Winograd, quien en el documento criticó especialmente una operación de tierra a gran escala lanzada apenas 60 horas antes de que entrara en vigor el alto el fuego aprobado por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

El responsable de la comisión afirmó que dicha operación no consiguió su objetivo.

Winograd entregó el informe anteriormente en mano al primer ministro israelí, Ehud Olmert, que desde hace días se ve sometido a una creciente presión política en relación a los errores cometidos durante la guerra.

De todas maneras, según medios de comunicación israelíes, la oficina del primer ministro se mostró "optimista" y "satisfecha" por los resultados del informe.