La bandera iraquí ondea ayer de nuevo en el edificio central de la Administración de Faluya, uno de los principales baluartes del Estado Islámico en Iraq, que poco a poco va cediendo terreno ante el avance de las fuerzas gubernamentales.

Una fuente de seguridad dijo a Efe que las fuerzas del Ejército y sus aliados arrebataron el control del edificio a los yihadistas del EI, en el marco de la ofensiva gubernamental sobre Faluya, que ha alcanzado el corazón de la ciudad más de tres semanas después de iniciarse. La reconquista del edificio gubernamental se produjo después de librar intensos enfrentamientos con los combatientes del EI, en los que decenas de yihadistas perdieron la vida o resultaron heridos. Sin embargo, como es habitual, el Ejército no comunicó las bajas sufridas en sus filas.

Por otra parte, en declaraciones a la prensa, el jefe de la Policía Federal iraquí, general Shaker Yudet, confirmó la información y añadió que los terroristas que no murieron ni resultaron heridos huyeron del lugar. Además, el primer ministro iraquí, Haidar al Abadi, anunció que las fuerzas gubernamentales controlan el corazón de Faluya y sólo quedan algunos focos en manos del EI. En un discurso difundido por la televisión oficial Al Iraqiya, Al Abadi añadió que esos focos serán liberados en las próximas horas. Asimismo, difundió que el próximo objetivo para las fuerzas iraquíes en su lucha contra el EI será recuperar la ciudad de Mosul, feudo de los yihadistas en Iraq.

Por otra parte, una fuente de la Unidad Antiterrorista que varios de sus efectivos recuperaron el dominio de la zona industrial, del barrio Nazal y del área de Al Ersan, ubicados en el sur de la urbe. Además, agregó que los equipos de artificieros comenzaron la retirada de minas y artefactos explosivos que los terroristas colocaron en algunas viviendas y edificios como trampa para las fuerzas iraquíes.