La oposición siria inició ayer una cumbre considerada decisiva en la que tratará de reorganizarse para afrontar la creciente pérdida de credibilidad del Consejo Nacional Sirio (CNS), mientras la violencia volvió a azotar el corazón de Damasco y otros lugares del país.

La Asamblea General del CNS se reúne desde ayer en Doha (Qatar), para evaluar su estrategia política y económica después de que esta semana EEUU le retirase de forma explícita su reconocimiento como único representante de la oposición. El jueves, el CNS se reunirá con otras facciones opositoras "para coordinar el periodo transitorio en Siria, sea sobre la formación de un Gobierno interino o sobre la administración de la situación sobre el terreno", según un dirigente de la ejecutiva de este grupo, Ahmed Ramadan.

Sobre el terreno, al menos siete personas resultaron heridas por una fuerte explosión "terrorista" junto al aparcamiento de la sede del Sindicato Obrero y cerca del hotel Dama Rose, en el centro de Damasco, informó la agencia oficial Sana.

El Gobierno de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) volverán a reunirse mañana en La Habana para preparar el inicio de la negociación formal, mientras en el país murieron medio centenar de rebeldes y seis policías desde que se constituyó la mesa de diálogo.

Tras establecerse en Oslo (Noruega) la mesa de diálogo entre el Gobierno y la guerrilla, las partes acordaron un encuentro preparatorio del diálogo formal que empezará el día 15 en la capital cubana, sede permanente de las negociaciones. Las operaciones armadas no cesan porque no hay pactado un alto el fuego.