Cultura

Coppola y Cruz, en el limbo de la distribución

  • 'Manolete', con la actriz española y Adrien Brody y 'Youth without you', del creador de 'El padrino', son algunos de los títulos pendientes de estreno en nuestro país.

El tren de las 3:10, alabada versión de un clásico del western con Russell Crowe y Christian Bale en su cartel, llega a las salas españolas tras más de un año en el limbo de la distribución, situación similar a la que viven algunas cintas de Francis Ford Coppola, Penélope Cruz, Wong Kar Wai o Gus van Sant.

La razón por la que permanecen inéditas muchas de estas producciones, de evidente atractivo comercial, reside en la perenne crisis en la industria cinematográfica española, y por tanto en la de sus productoras y distribuidoras, que compiten en un mercado dominado por unas salas de exhibición que controlan las multinacionales.

En el caso de los distribuidores independientes españoles, llevan años denunciando que las televisiones, tanto públicas como de pago, no compran sus películas, lo que favorece así a los distribuidores norteamericanos.

Mucho se habló durante 2006 del rodaje de Manolete, biografía del conocido torero producida por Andrés Vicente Gómez, pero poco se ha vuelto a saber de su estreno. La cinta es una coproducción hispano-británica dirigida por Menno Meyjes con Penélope Cruz y el oscarizado Adrien Brody como protagonistas y con un presupuesto que ronda entre los 10 y los 20 millones de euros.

Los continuos retrasos en su estreno se intercalaron con los sucesivos falsos rumores que situaban a la cinta en los cuatro festivales más prestigiosos, Berlín, Cannes, Venecia y Toronto, y que aludían a la falta de liquidez de su productor, Andrés Vicente Gómez, que habría provocado que la cinta fuese secuestrada por los acreedores. Oficialmente, el filme sigue en proceso de postproducción.

Al también muy comentado rodaje de Tetro, de Francis Ford Coppola, le precedió el de Youth without youth, el relato de una misteriosa historia de amor ambientada en la Segunda Guerra Mundial que se convirtió en el regreso del legendario cineasta estadounidense, diez años después de Legítima defensa. A pesar de las lógicas expectativas generadas, tampoco ha llegado a las salas españolas.

Tras los laureles recibidos en los últimos años con Last days y con Elephant -triunfadora absoluta en la edición del 2003 del Festival de Cannes-, el cineasta Gus van Sant repitió en 2007 triunfo en el certamen francés con Paranoid Park. La cinta ya se ha podido ver en una treintena de países, aunque aún no en España, mientras que se prevé que el estreno español de su nuevo trabajo, Milk, se produzca a principios del próximo año.

También se le solapan proyectos en España al chino Wong Kar Wai, director de moda para el gusto occidental como responsable de 2046, Deseando amar o Fallen angels. El pasado año trasladó su singular pulsión creativa a los áridos paisajes estadounidenses en My blueberry nights, road movie con un reparto estelar encabezado por Jude Law, Natalie Portman y Norah Jones proyectada en octubre en el Festival de Valladolid pero que aún no ha llegado a las salas comerciales españolas. En este tiempo, Wong Kar Wai le ha dado tiempo a presentar Ashes of time redux, una nueva versión de su propia película, firmada en 1994.

Otro reparto de relumbrón es el formado por Heath Ledger, Cate Blanchet y Richard Gere, quienes encarnan a Bob Dylan en otra celebrada biografía cinematográfica, I'm not there, de Todd Haynes, cuya originalidad atrajo la atención de todos los medios internacionales a finales del año pasado.

En este mismo género también se puede encontrar el esperado debut en la dirección de Anton Corbjin. Control es la alabada biografía cinematográfica del enigmático líder de Joy Division, Ian Curtis, a cargo del fotógrafo holandés, que en su día inmortalizó al grupo convirtiéndose en parte responsable de su imagen y que en 2007 recorrió, en blanco y negro y a lo largo de dos horas de metraje, la vida del cantante británico.

Experto en joyas perdidas es el Festival de Gijón, y uno de sus estandartes el cineasta sueco Lukas Moodysson, conocido entre el público español por Fucking Åmål y Together y gracias al apoyo del certamen español. Se mantienen inéditos en salas comerciales sus dos últimos trabajos, que también presentó en Gijón: Lilya 4 Ever, la historia de una adolescente abandonada por su madre que acaparó los galardones de su palmarés en 2002, y A hole in my heart, una historia sobre las relaciones humanas a través del cine porno.

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