La delegada municipal de Cultura, Maribel Montaño, tiene en estudio la creación de una segunda sala o sala B en el Teatro Lope de Vega, que tendrá un aforo de 150 personas y que estaría ubicada en el café-bar del Casino de la Exposición, construido en 1929 y vecino del Lope. Estos planes ya fueron planteados, al menos parcialmente, por su antecesor en el cargo, Juan Carlos Marset, ahora director del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (Inaem), quien propuso la creación de un "restaurante musical" en este mismo inmueble.

Montaño asegura que el objetivo del Ayuntamiento sevillano "es darle la mayor vida cultural posible a este espacio de la ciudad, dentro de las actividades compatibles con este inmueble". En este sentido, anuncia que en este año se intensificará el contenido del Casino con exposiciones "de envergadura", apropiadas para un espacio de la "magnificencia" del salón de la cúpula del edificio cercano al Parque de María Luisa.

La delegada de Cultura dice además que el Casino de la Exposición complementará la actividad del Lope de Vega, que ahora tiene una programación "muy condensada" que provoca en ocasiones "dificultades a la hora de encontrar hueco para incluir muchos espectáculos".

La creación de esta segunda sala escénica no podrá llevarse a cabo en el salón principal de la cúpula, aclara Maribel Montaño, pues ese espacio presenta "problemas de acústica para representar obras de teatro". El actual salón-bar del Casino sí tendría capacidad para unas 150 personas, un "formato muy adecuado" para los planes del Gobierno municipal, según la delegada.

Montaño explica que este proyecto está siendo analizado ahora por la directora del Casino, Ana Ferrand, que elaborará un estudio sobre la cuestión en colaboración con la dirección del teatro. De hecho, el responsable del Lope de Vega, Antonio Álamo, ya manifestó su intención de crear una sala B para el teatro en el Pabellón de Uruguay -inmueble contiguo- cuando asumió el cargo, aunque lo descartó posteriormente ya que ese uso no estaba contemplado para el edificio. La idea de Montaño consiste en ubicar dicha sala B en el propio Casino, para equipararse a "muchos teatros de importancia en Europa".

Montaño afirma que el proyecto definitivo contemplará la apertura de un restaurante musical en el Casino, como ya propuso Marset. La idea original de éste era convertir el espacio que en los últimos años explotaba cada verano el sitio en un "restaurante musical" que seguiríe el modelo de establecimientos como el Calle 54 madrileño o el Blue Note neoyorquino, ambos especializados en una programación de jazz.

Este proyecto no llegó a llevarse a cabo, de modo que la discoteca Casino de la Exposición ha seguido funcionando este verano en este emblemático espacio de la capital andaluza.