El matador de toros Domingo López Chaves sufrió una cornada por el peligroso toro que abrió plaza en el quinto festejo de la Feria de Quito, en el que triunfó a lo grande Diego Rivas. El diestro salmantino, que confirmaba alternativa en Iñaquito, resultó empitonado en la cara interna del muslo izquierdo por Mil Caricias, un peligroso ejemplar de Santa Coloma cuando trataba de muletearlo por el pitón izquierdo. El torero fue intervenido de una herida con dos trayectorias que no afecta a vasos ni arterias fundamentales y fue ingresado en el centro Novaclínica. Al toro que hirió a López Chaves lo estoqueó el toledano Eugenio de Mora.

Con dos tercios de entrada se lidiaron toros de Santa Coloma Internacional, de distintas hechuras y juego. El primero, peligroso, incierto y complicado; segundo, con sentido; tercero, manso; el cuarto, boyante, fue premiado con la vuelta al ruedo; quinto y sexto, exigentes. López Chaves, que confirmaba alternativa, fue herido por su primero y quedó inédito. Eugenio de Mora, silencio en el toro que estoqueó por López Chaves, silencio y vuelta al ruedo. Diego Rivas, oreja, oreja y dos orejas.