Un abanico de propuestas en el que conviven títulos clásicos del repertorio con una mirada a la creación más actual, el veterano Joaquín Achúcarro con el joven Javier Perianes, el flamenco sofisticado de Rocío Márquez con el carisma melancólico de Salvador Sobral. Con una oferta que busca la “diversidad” y el “eclecticismo” con el propósito de “llegar a nuevos públicos”, el  Teatro de la Maestranza  parece decidido a dejar atrás los fantasmas de la crisis y presenta una temporada en la que refuerza su oferta en ámbitos como la ópera y la danza.

Lucia di Lammermoor, de Gaetano Donizetti, será el título que abra (el 26 y el 29 de octubre, el 1 y el 4 de noviembre) el apartado lírico. Con este montaje el coliseo continúa su apuesta por voces españolas: la protagonista será la soprano sevillana Leonor Bonilla, que entre otros reconocimientos ha obtenido el Premio de Nuevas Voces Ciudad de Sevilla y que en esta producción de la Deutsche Oper de Berlín estará acompañada por el tenor barcelonés José Bros.

En la línea de otras óperas que tienen en la capital andaluza su fuente de inspiración se programará el 31 de octubre -la fecha no es casual, como resaltó el director artístico del teatro, Pedro Halffter- una versión en concierto del Tenorio de Tomás Marco, una actualización del mito de Don Juan, sustentada principalmente en la obra de Zorrilla, que el compositor creó a finales de la década anterior pero que no estrenó hasta el año pasado.

A este título le seguirá (el 30 de noviembre y el 2 y 4 de diciembre) un programa doble, “una combinación que nunca se ha dado hasta ahora”, como señaló Halffter: Der Diktator, de Ernst Krenek, que se estrena en España en una producción del Maestranza, y El emperador de la Atlántida, de Viktor Ullmann. La primera de las piezas estará dirigida por el sevillano Rafael R. Villalobos, uno de los talentos emergentes de la escena europea, que regresará a su ciudad natal tras las funciones este mes de su auto desacralizado Gratia Plena y que ahora se sumerge en una obra que deambula “entre lo político y lo doméstico” y sirve como alerta para “un presente en el que por Europa y el mundo planea la sombra de un fascismo que no se termina de ir”, dice el director. La ópera de Krenek, quien se basó en la figura de Benito Mussolini, dialogará con El emperador de la Atlántida, que parodia a través de su protagonista a Hitler y que Ullmann compuso, un año antes de morir en Auschwitz, cuando estaba prisionero en el campo de Terezin.

Llevaba casi dos décadas sin representarse en Sevilla, pero Il trovatore de Verdi ocupará el Maestranza en varias funciones entre el 20 y el 29 de marzo, en una producción del Teatro Verdi de Trieste cuyo reparto lidera la aclamada soprano Angela Meade.

La temporada operística proseguirá con una versión en concierto (13 de abril) de Israel en Egipto, de Häendel, interpretada por The Sixteen Orchestra y dirigida por Harry Christophers, una cita que el Maestranza programa en coproducción con el Festival de Música Antigua (Femás) y en colaboración con el Centro Nacional de Difusión Musical (CNDM).

Tras su éxito con 'Adriana Lecouvrier', Ainhoa Arteta regresará con 'Andrea Chénier'

El calendario de ópera se clausurará con Andrea Chénier, de Giordano (5, 8, 11 y 14 de junio), un título que supondrá la vuelta de Ainhoa Arteta al Maestranza tras su aplaudida Adriana Lecouvreur. Antes, en abril, el teatro acogerá una propuesta para escolares y familias, Guillermo Tell, de Rossini.

Además, los aficionados a la zarzuela podrán reencontrarse con el género gracias a La tabernera del puerto, de Pablo Sorozábal (7, 9 y 10 de febrero), que visitará Sevilla en un ambicioso montaje que tiene la dirección de escena de Mario Gas, la escenografía de Ezio Frigerio o el vestuario de Franca Squarciapino como reclamos.

Entre las novedades que prepara el Maestranza para los meses próximos, Halffter destacó un apartado de música coral que protagonizarán el coro femenino (18 de diciembre) y el masculino (4 de abril) de la A. A. del Teatro Maestranza, y el ciclo Música degenerada, que partiendo de la etiqueta con la que los nazis catalogaron a los creadores de vanguardia propone un repertorio diverso (Bartók, Messiaen, Mahler) que interpretarán el flautista Juan Ronda y la pianista Auxiliadora Gil (20 de noviembre) y Pedro Halffter y Óscar Martín, ambos al piano (29 de noviembre).

La danza vuelve con fuerza al Maestranza con la presencia del Ballet Nacional Checo, que llevará a escena La Bayadère (del 9 al 12 de enero), la compañía del británico Wayne McGregor (17 de febrero), el Malandain Ballet Biarritz, que presenta Marie-Antoniette (24 de febrero), y el Tulsa Ballet (9 de abril), además de las habituales incursiones en esta disciplina gracias al Mes de Danza y el programa Vertebración.

Un ciclo sobre música degenerada y otro de música coral destacan entre las novedades

Dos de “los mejores pianistas de la actualidad”, el veterano Joaquín Achúcarro (17 de diciembre) y el joven Javier Perianes (22 de marzo), visitarán asimismo el Maestranza, que brindará entre otros conciertos los del trío de cámara compuesto por Juan Pérez Floristán, Pablo Barragán y Andrei Ioniță (1 de diciembre), la Orquesta Joven de Andalucía (22 de abril) o la Joven Orquesta Nacional de España (17 de junio), que clausurará el curso 2018-2019 de la Universidad de Sevilla. Además, la Orquesta Barroca de Sevilla arropará el recital de Veronica Cangeni y Carlos Mena (19 de enero), abordará el programa Cuando la púrpura ríe junto a la soprano Nuria Rial y el concertino Stefano Barneschi (19 de febrero) y otro titulado El amanecer del Clasicismo junto a Enrico Onofri (4 de junio).

El Maestranza, que albergará algunas de las citas de la Bienal, anuncia también dos esperados conciertos de flamenco durante el curso. La onubense Rocío Márquez, una de las intérpretes más valientes y lúcidas de la música actual, protagonizará el 28 de marzo una velada en la que adelantará algunos de los temas de su próximo disco. Y el 25 de mayo pisa las tablas del teatro sevillano un tándem que ya ha dado muestras de su poderosa química en otros escenarios, el pianista lebrijano Dorantes y la cantaora granadina Marina Heredia.

Una decisión “que está llamando la atención”, reconoce Halffter, es la presencia del portugués Salvador Sobral en el ciclo Grandes intérpretes. El ganador de Eurovisión, celebrado como una especie de titán que había devuelto el interés por la música a un festival desprestigiado, desplegará su voz cálida en el Maestranza en su concierto del 3 de noviembre.

La presentación de la temporada 18/19 también anticipó uno de los reclamos de la siguiente temporada: el regreso de los queridos Les Luthiers, en septiembre de 2019, con su antología Viejos hazmerreíres.

En la presentación de la temporada, en la que participaron el delegado de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Sevilla, Antonio Muñoz, y la secretaria general de Cultura de la Junta, Cristina Saucedo, no faltó el debate sobre la necesidad de renovar el idilio con los espectadores. “Han sido 25 años maravillosos, pero necesitamos nuevos bríos”, sentenció Muñoz. “Es un tema del que hemos hablado mucho en los consejos de administración y en las charlas que tenemos entre nosotros”, admitió el gerente del teatro, Antonio Garde, que añadió no obstante unas cifras satisfactorias de este curso que termina: de los costes de producción, estimados en 3.050.000 euros, se cubrió el 95% con la venta de localidades.

Muñoz también demandó una mayor implicación de las instituciones con el proyecto. “Si queremos jugar en la Champions, necesitamos menos golpes de pecho y más demostrar el amor con presupuesto”, dijo, aunque ni el Consistorio ni la Junta pudieron precisar en su comparecencia con la prensa un compromiso concreto. El delegado quiso acercar también a la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla (ROSS) y el Maestranza, tras el desencuentro sugerido la semana pasada, por cuestión de fechas, por parte de Axelrod. “La mayor parte de la oferta de la ROSS se desarrolla en el Maestranza. Mi deseo es que el año que viene haya una sola presentación de la programación, no dos actos separados”, expuso Muñoz. Halffter, por su parte, afirmó que con la ROSS tenía una relación estupenda. “Quien viniera a las representaciones de Adriana Lecouvrier, que han sido maravillosas, ha podido comprobarlo”, concluyó el director artístico del Maestranza.