El diestro Pedro Carrero paseó el único trofeo de la novillada celebrada en Valdemorillo, segundo festejo de la Feria taurina de San Blas y La Candelaria, en la que sin embargo faltó interés por parte de novillos y novilleros. Se lidiaron novillos de El Estoque, desiguales de presencia, bajos de raza, algunos flojos, y en general, de poco juego. No respondió la novillada en lo que a ganado se refiere, ni la terna de novilleros terminó de dar el paso adelante. Sólo Pedro Carrero en el quinto, un astado flojo pero con clase, dejó atisbos de buen toreo. Se gustó en una faena de muleta en la que hubo parsimonia y pinturería. Pero quedó la duda de que le pudo faltar novillo, o éste fue precisamente el ideal para confiarse. En el anterior, complicado, no resolvió, aunque con el capote había dejado notables pinceladas.

Nazaré anduvo fácil en una primera faena de corte derechista y con un epílogo al natural con el novillo muy mermado. El cuarto se movió con muy poca clase, y aquí no se dio coba el novillero.

Cortés, verde todavía, con el novillo más encastado, el tercero, por momentos se vio desbordado. Con el sexto, el más cuajado del encierro, aunque también el más blando, pegó pases sin dejar poso.