Por primera vez desde que llegó al cargo, la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, marcó ayer distancias con el ya exdirector de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), imputado por un presunto delito de apropiación indebida, el más grave de los tres cargos que pesan sobre él. La entidad, dijo Sinde, "ha hecho bien" en apartar a Teddy Bautista. De esta forma, añadió, "su defensa será mucho mejor desde fuera de la institución". La ministra se declaró "preocupada" por la posibilidad de que "se contamine todo el modelo de protección intelectual" debido a la "actuación incorrecta o ilegal de unos gestores". De hecho, deseó que la SGAE salga de este proceso judicial "más sólida" y siendo apreciada "con más confianza".

Muy crítico con la gestión de Sinde y con las prácticas de la SGAE, el presidente de la Asociación de Internautas, Víctor Domingo, le recordó ayer a la ministra -tras llegar a pedir su dimisión en los días anteriores- que "no puedes poner al zorro a cuidar gallinas". "Sinde es la ministra de su chiringuito [de Bautista], fue un error designarla y fue un error mantenerla", insistió Domingo. La titular de Cultura considera que el Ministerio -y por tanto tampoco ella- es culpable de nada. El Gobierno, sostuvo ayer Sinde, "no podía intervenir" en este tema, ya que sólo "da licencia a una entidad" y "no tiene mecanismos intermedios ni sanciones". Una licencia que no se ha planteado "revocar", aunque sus asesores están "reexaminando todos los expedientes de manera preventiva", y en el caso de que se constate "alguna irregularidad", dijo, "el Estado pediría íntegro el reintegro" [sic].

La ministra reconoció, por otro lado, que el canon digital "tiene que ser transformado" para "ajustarse a la sentencia de Bruselas". En este punto recordó que la UE se ha comprometido a hacer una reflexión conjunta sobre la aplicación del canon. "Estamos buscando esa solución alternativa que reclaman los usuarios". Sinde hizo estas declaraciones tras asisitir a una conferencia en Madrid del presidente de la asociación de productoras de cine (Fapea), Pedro Pérez, que durante su charla calificó el canon como "una caspa". "Un país necesita que sus autores estén remunerados dignamente", dijo Pérez, que añadió: "Reto a encontrar cualquier otra fórmula porque todo el mundo quiere cobrar por su trabajo".

Mientras, el proceso sigue en los juzgados. El exdirector general de la filial digital de la SGAE, José Luis Rodríguez Neri, recurrió ayer el auto que decreta su ingrenso en prisión, bajo fianza de 300.000 euros. Neri, señalado por el juez de la Audiencia Nacional como "cúspide" del entramado empresarial para el desvío de fondos que Bautista "consintió", y que está desde el pasado lunes en la cárcel de Soto del Real (Madrid), alegó razones familiares y de arraigo.

Ante este panorama, hay quien se ha visto obligado a salir a declarar que las entidades de gestión de derechos de autor "no son una pandilla de amiguetes". Así lo afirmó el presidente de Agedi (productores fonográficos), Antonio Guisasola, después de reunirse con Sinde para transmitirle su alarma ante ese "sambenito". A ese encuentro acudieron también representantes de Aisge (directores de escena, actores y bailarines), AIE (artistas intérpretes), Egeda (productores audiovisuales), Cedro (autores y editores) y DAMA (medios audiovisuales).