El Íbex 35 cerró la semana con ganancias del 1,48%, lo que llevó al selectivo a situarse en los 9.335 puntos. El índice logró ayer superar la cota de los 9.400, pero el descenso del 0,7% experimentado ayer le impidió consolidarla.

El principal índice español superó el jueves por primera vez desde el pasado 3 de mayo los 9.400 puntos, en un contexto de optimismo que duró poco.

La subida semanal se ha debido a las nuevas negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China, y a la elección de Christine Lagarde como próxima presidenta de Banco Central Europeo (BCE) en sustitución de Mario Draghi.

A finales de semana, los inversores volvieron a deshacer posiciones ante las acusaciones de manipulación de divisa de Trump sobre Europa y China.

Los valores más expuestos con la guerra comercial como CIE Automotive, Arcelormital y Acerinox fueron los más penalizados, con caídas superiores al 4% en la semana, ya que a pesar de las nuevas negociaciones comerciales, los inversores no confían en un acuerdo a corto plazo.

Enagás y Naturgy también han sufrido estos días un fuerte descenso bursátil tras la propuesta de la Comisión Nacional del Mercado y de la Competencia (CNMC) de una nueva regulación más adversa sobre el sector del gas en España.

Los bancos, al contrario, subieron de media más de un 3% a pesar de que la próxima presidenta del BCE seguirá con una política continuista, partidaria de nuevos estímulos y tipos bajos.

El resto de las principales plazas bursátiles del Viejo Continente concluyeron la jornada en negativo. El Dax de Fráncfort cedió un 0,54%, el Cac 40 de París un 0,57% y el londinense Ftse 100 se ha dejado un 0,68%.