La Bolsa española cayó ayer el 1,23% y perdido los 9.700 puntos, con lo que vuelve a niveles de marzo pasado, lastrada por los descensos de los bancos y las eléctricas, así como por la volatilidad de Wall Street. Con la prima de riesgo en 78 puntos básicos, el Íbex 35, principal índice bursátil nacional, perdió 120,4 puntos, ese 1,23%, hasta las 9.650,7 unidades, con lo que profundiza en las pérdidas anuales al 3,91%.

La volatilidad continúa dominando en los mercados europeos -Madrid ha encadenado su octava jornada con movimientos superiores al 1%-, arrastrados por los vaivenes de Wall Street. Así, Milán cayó el 1,35%; Fráncfort, el 0,70%; París, el 0,60% y Londres, el 0,13% afectadas también por el alza del euro, que al cierre de la sesión se cambiaba a 1,2356 dólares. También fue bajista la referencia de Toki. Si subieron en Asia las plazas chinas, donde Hong Kong avanzó el 1,29% y el CSI 300 de Shanghái y Shenzhen, el 1,17%.

Todos los pesos pesados del Íbex cerraron a la baja, ya que Inditex cedió el 1,96%; Santander, el 1,88%; Iberdrola, el 1,51%; Telefónica, el 1,45%; BBVA, el 1,39% y Repsol, el 0,68%. ACS fue el farolillo rojo del selectivo al caer el 3,24%, aunque los sectores más castigados fueron los bancos y las eléctricas, puesto que CaixaBank retrocedió el 2,33%; Endesa, el 1,72%; Bankinter, el 1,31%; Bankia, el 1,08%; Red Eléctrica, el 0,93% y Sabadell, el 0,61%. ArcelorMittal ganó el 2,27% e Inmobiliaria Colonial, el 0,81%. En el mercado continuo, Borges Bain bajó el 4,27% y Vértice 360 repuntó el 48,28%.

El precio del Brent, crudo de referencia europea, disminuía hasta 62,44 dólares al cierre del parqué nacional, en el que ayer se negociaron casi 1.800 millones.