El Íbex 35 finalizó ayer con una caída del 0,5%, aunque logró mantenerse por encima de la cota de los 10.000 puntos. Concretamente, se situó en los 10.038,8 enteros y rompió con una racha de cuatro jornadas consecutivas al alza.

En terreno positivo, la mayor subida la experimentó Grifols (+2,46%), cuyos títulos finalizaron la jornada de presentación de sus resultados a un precio de 24,14 euros; seguido de Amadeus (+1,22%), Cellnex Telecom (+0,94%), Meliá (+0,87%) y Enagás (+0,82%).

De su lado, la mayor caída se la anotó Indra (-3,78%), lo que situó el precio de sus títulos en 11,43 euros; seguida de Bankia (-2,82%), Caixabank (-2,11%), Bankinter (-1,55%) y BBVA (-1,46%). El único banco que finalizó la sesión en verde fue Sabadell (+0,73%), mientras que Santander registró una caída del -1,14%.

Fuera del Íbex destaca Unicaja, cuyos títulos se impulsaron un 4,53% tras presentar resultados del primer trimestre, hasta los 1,568 euros, lo que supone un máximo histórico.

En el resto de Europa, la tendencia de las principales plazas fue también negativa. Fráncfort se dejó un 0,88%, Londres un 0,54% y París un 0,5%.

En los mercados de deuda, la prima de riesgo española se situó en los 71,6 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años en el 1,234%. Mientras, en los mercados de divisas, el euro se intercambiaba por 1,1955 dólares.

El analista de Self Bank Felipe López-Gálvez atribuye las caídas en el Ibex y el resto de Bolsas europeas a la ralentización de la inflación en la zona euro, que se situó en abril en el 1,2%, una décima por debajo del dato del mes anterior.