La ventana
Luis Carlos Peris
Y por encima de todo, la marca Sevilla
Calamitoso papel el que lleva realizando el Betis en la tercera competición continental, esa especie de vertedero al que van a parar equipos de toda laya, mayormente lo peor de la clase alta de cada Liga. Y este Betis ha demostrado palmariamente que incluso la Conference le viene grande, muy grande según se confirmaba anoche en un recinto para sólo 5.000 espectadores, lo que viene siendo un campo de polvareda.
Como en Valencia, una desconexión inexplicable de tres minutos en el inicio del segundo tiempo sirvió para que el modestísimo Mladá Boleslav no sólo neutralizase el gol de Lo Celso, sino que lo remontaba. Pero es que ya al descanso podía haberlo conseguido, algo que evitó Adrián. Es más, sin Adrián en la portería posiblemente el Betis se hubiese vuelto para Sevilla con cuatro goles en la talega. Y tras el descanso, el apagón y fusilamiento del pobre Adrián a quemarropa.
¿Tiene explicación la debacle del Betis anoche en un pueblo de la República Checa? Claro que la tiene, por supuesto que sí. Incluso en algo tan azaroso como el fútbol, la lógica impone su criterio en una mayoría de ocasiones. Y la lógica dice que como el equipo actual es peor que el anterior, con la plaga de lesionados como excusa principal, los sucesos recientes pueden darse como consecuencias fácilmente explicables y lo que se hizo ante el colista se repite ante un equipito.
Un equipito este Mladá que pudo golear a un Betis poblado de futbolistas que no parecen aptos para un equipo que presume de crecimiento continuo, pero que se ha ido deteriorando espectacularmente. Y como colofón al gran ridículo, la roja directa a Lo Celso cuando la catástrofe era un hecho consumado. Y ahora, y con la confirmación de que este Betis no da nivel para Europa, a ver de qué color pinta el futuro con Anoeta y el Barça a la vista y el San Andrés por medio; a ver...
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