El Íbex 35 concluyó la jornada de ayer con un descenso del 0,22%, lo que le llevó a perder la cota psicológica de los 9.600 puntos, un giro que se produjo coincidiendo con la investidura de Pedro Sánchez como próximo presidente del Gobierno y tras la apertura a la baja de Wall Street.

El principal índice español se colocó en los 9.579,8 enteros, al caer un 0,22%, pendiente también de las tensiones geopolíticas entre Estados Unidos e Irán.

En el lado de las ganancias destacaron valores como CIE Automotive (3,38%), Grifols (2,74%), IAG (1,54%), Ferrovial (1,51%) e Inditex (1,27%).

En lado contrario se situaron Endesa (-2,11%), Siemens Gamesa (-2,09%), Iberdrola (-1,95%) y Bankinter (-1,55%).

El resto de bolsas europeas finalizaron con caídas del 0,02% en los casos del Ftse 100 de Londres y del Cac 40 de París, respectivamente, y con avances del 0,76% para el Dax de Fráncfort.

Ayer, se conoció que la inflación de la Eurozona repuntó al 1,3% en diciembre, su mayor subida desde junio, y que las ventas minoristas crecieron un 1% en noviembre, frente al retroceso del 0,3% un mes antes.

Por otro lado, el precio del barril de petróleo de calidad Brent se relajó este martes, tras superar el lunes los 70 dólares, y se quedó en 68 dólares. El Texas se colocó en 62,56 dólares.

La cotización del euro frente al dólar se mantuvo en 1,1139 billetes verdes y la prima de riesgo española en 67,63 puntos básicos, mientras que el interés exigido al bono a diez años subió al 0,392%.

Los analistas de Barclays consideran que el nuevo Gobierno de coalicións podría obstaculizar las perspectivas de crecimiento a medio plazo para España.