EL Íbex se anotó ayer una subida del 0,49% que le permitió quedarse a las puertas de los 10.500 puntos, aliviado por la cercanía de la puesta en marcha del rescate a Grecia y los buenos resultados empresariales. El selectivo madrileño selló la jornada en los 10.492,2 enteros, con dieciocho valores en positivo y dieciséis en números rojos, mientras que el Índice General de la Bolsa de Madrid terminó en 1.086,68 puntos, lo que supone una subida del 0,62%.

El parqué se desmarcó con sus ganancias de la tónica imperante en el resto del Viejo Continente, donde los inversores, más escépticos sobre la inminencia de la solución a Grecia, se decantaron por las ventas sobre todo en Londres (-1,2%), pero también en París (-0,62%) y Fráncfort (-0,15%).

La mayor subida del Íbex fue para Mapfre (+2,75%), que presentó un beneficio neto atribuible de 273,1 millones en el primer trimestre, lo que un 4,8% menos. En el segundo y tercer puesto se colocaron Gas Natural (+2,47%) y BME (+2,41%) seguidos de Endesa (+2,15%) e Iberdrola (+1,78%).

Entre los pesos pesados, se apuntaron ganancias superiores al índice tanto Telefónica (+1,4%) como Repsol (+1,03), Santander (+0,94%) e Iberdrola (+0,71%), mientras que las de BBVA fueron inferiores (+0,24%).

El resto de valores del sector bancario, duramente castigado por el caso griego, registró tendencias dispares, con repuntes en el caso de Bankinter (+0,89%) y recortes para Banesto (-0,3%) y Popular (-0,61%). Sabadell terminó en tablas. Arcelormittal se apuntó la mayor pérdida (-3,33%), por delante de las de Ferrovial (-2,38%) y Abertis (-2,35%). También bajaron Grifols (-2,33%), Inditex (-1,5%), OHL (-1,35%) y FCC (-0,92%).

En el mercado de divisas, el cambio del euro quedaba establecido en 1,3301 billetes verdes.