Tomando el retorno de Zidane como percha, hoy vamos a intentar un sobrevuelo generalizado por la vertical de LaLiga. Una Liga que se muestra más compacta que en mucho tiempo y en la que ni siquiera el colista puede darse por descendido. También, una edición del todos contra todos en que la lucha por Europa se auspicia como la más encarnizada en mucho tiempo y en la que únicamente tiene al título como presuntamente decidido.

Y en este sobrevuelo liguero vemos que se trae unos ropajes como adquiridos en las Galerías Lafayette. Es por la influencia de lo francés en ella, sobre todo por el papel que recitan Zinedine Zidane y ese milagro del área que atiende por Wissam Ben Yedder. La prodigiosa cifra de goles del galo-tunecino y la forma en que desatasca al Sevilla lo han encumbrado a la vez que ridiculiza a los que allá por el mes de agosto quisieron desprenderse de sus servicios. En fin, cosas...

Desconozco las razones que Florentino Pérez ha puesto en la cuenta corriente de Zidane para que poco más de medio año después de despedirse vuelva para hacer lo mismo que entonces desechó. No ha pasado mucha agua bajo los puentes de aquello, pero sí una sucesión de hecatombes propiciatoria para que el mandarín merengue se vea obligado a esta sublime decisión. La primera, el descalzaperros que organizó en vísperas del Mundial birlándole su manijero a España.

Existía el precedente del Villarreal con Calleja, pero la pregunta es qué habrá pasado por la cabeza del pied noir para volver al regazo de Pérez. Ben Yedder y Zidane son los hombres del momento y podría incluirse en el lote a Jesé, que también vino de Francia, tras su primer gol válido en el Betis. ¿Logrará el equipo bético la hazaña de hacer doblete ante el Barça? Cuánto juego da LaLiga para la producción periodística y ay del día que nos falte, que será ya mismo.