NOSTALGIA en sobredosis como para generar un caudal de lágrimas inimaginable al comprobar cómo lo que pudo haber sido se ha quedado en una frustración más. Viendo el revival continuo que la RTVA está haciendo en conmemoración de sus Bodas de Plata me acongoja comprobar cómo aquel tiempo que llegó preñado de ilusiones fue difuminándose hasta convertirse en un simple aparato de partido. Y como de partido no se cambia aunque el de siempre pierda las elecciones, pues todo ha sido un más de lo mismo para mayor grandeza del pensamiento único y fracaso absoluto de la muy cacareada vertebración andaluza. Sólo ha servido el invento para asumir mano de obra periodística, aunque haya sido a costa de un contribuyente que ve asombrado cómo la mayor parte de su dinero no va, precisamente, a los bolsillos de los periodistas. 25 años.