Curioseando, mirando cualquier detalle, nos hemos encontrado este tornillo que termina en anilla y que conocemos como cáncamo colocado en uno de los muros exteriores de nuestra Catedral. Hay más, lo que no sabemos es para qué ha servido o servirá.

Tags

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios