LA Defensora del Espectador fundacional en el cargo, Elena Sánchez Caballero, que fue nombrada en 2008, va a finalizar su mandato. Justo es rendirle desde aquí un sentido homenaje. Qué duda cabe que RTVE responde es uno de mis programas de cabecera. Lo he seguido con fidelidad desde el primer día. E incluso he reivindicado que su frecuencia mensual pasase a ser semanal. Que se convirtiese en el programa de la casa, esa revista en donde acoger la autopromoción de todos los contenidos de la amplísima Corporación RTVE. En la televisión, en la radio, y en la cada vez más imponente web.

El responsable de la misma, Ricardo Villa, visitó el plató del programa para contestar a algunos espectadores que, como quien suscribe, echamos de menos una mayor profusión en la ampliación de los programas de archivo. Desde que no contamos con el Canal Nostalgia (después el 50 Años) no hay otro medio para visionar los programas del pasado que acudir a los contenidos de esta web. Es cierto que en el terreno documental se han dado pasos de gigante. La ventana Somos Documentales es tan imponente que uno podría encerrarse ahora y no volver a ver la luz hasta avanzado el invierno si quisiese ver todos sus contenidos. Pero todavía queda mucho archivo por recuperar. Recientemente visité por vez primera la Oficina de la Defensora, para conocer en persona a su reducido pero eficaz equipo. Me presenté en el despacho por sorpresa. Sin avisar. Como anécdota puedo contar que tenían mi foto colgada en la pared, a modo de crítico de cabecera. Me dio alegría evidenciar que nuestra fidelidad es mutua. Sólo cabe felicitarnos por la enorme labor realizada por Elena, y desear que la sucesora que siga sus pasos.