ES un hecho que en España prima el ahorro conservador y que la renta fija, históricamente, ha sido un producto financiero "estrella" en muchos hogares. Pero… el mundo de las finanzas ha cambiado -y mucho-. Y con ello también la manera de afrontar la gestión de la deuda en las carteras de los inversores. Hablar hoy de renta fija es hablar de un sector muy amplio y heterogéneo, donde concurren multitud de variables y donde elegir una alternativa u otra, según en qué condiciones de mercado, puede ofrecernos resultados muy diversos. Sobre todo en la situación actual, donde los tipos de interés se encuentran en niveles tan bajos (la tasa del BCE en el 0,25%).

Es fundamental, por tanto, escoger un buen producto. Y el fondo de inversión, en este sentido, ofrece grandes ventajas frente a la compra directa de deuda: liquidez, operativa, fiscalidad, diversificación… Pues bien, estas son, bajo nuestro punto de vista, las mejores alternativas para invertir "bien" hoy en renta fija a través de fondos:

Monetarios (euro). La liquidez es un "tesoro" y como tal hay que cuidarla. Por eso, es básico elegir un buen monetario que ofrezca una rentabilidad aceptable y, además, aplique unas bajas comisiones. La opción más interesante es la de los fondepósitos, monetarios que invierten un elevado porcentaje de su patrimonio en depósitos (con poder de negociación frente a las entidades financieras). El año pasado algunos obtuvieron un 3% de rentabilidad, sin apenas riesgo. Para este 2014 aún podrían conseguir más de un 2%.

Renta fija pública periférica. El tipo del bono alemán a 10 años se sitúa hoy en el 1,6%. El del bono español, con el mismo vencimiento, en el 3,5%. Y aunque es cierto que ese diferencial -a favor de la deuda española- se seguirá estrechando los próximos meses, aún hay recorrido. La mejor manera de aprovecharlo es vía fondos especializados en deuda española y que, además, realizan una gestión activa. Un ejemplo es BBVA Bonos España Largo Plazo.

Renta fija flexible. A veces, nos puede resultar complicado discriminar entre un tipo de renta fija u otro. Ante la duda, la mejor solución es un fondo con una gestión flexible, que module la inversión en función de las condiciones del mercado y de las diversas oportunidades que se vayan generando.

Retorno absoluto. Estos fondos tratan de obtener una rentabilidad positiva con independencia de lo que hagan los mercados, para lo cual utilizan técnicas de gestión alternativa. Los hay más orientados a la renta fija, como Renta 4 Pegasus, que han demostrado una gran consistencia en el tiempo.

Mixtos de renta fija. Fondos con una base importante de sus activos en renta fija, pero con un pie en la renta variable. Nos gustan los mixtos de renta fija centrados en Europa (sobre todo España), donde los gestores tengan el compromiso de invertir su propio dinero en el producto.

Hay otras alternativas: fondos de renta fija europea de alto rendimiento (high yield) con vencimientos cortos, fondos de bonos convertibles con perfil conservador, incluso algún buen fondo de renta fija emergente (aprovechando las recientes caídas de estos mercados; pero sólo para inversores agresivos). No encontrarán en esta lista, sin embargo, ni garantizados, ni fondos de rentabilidad objetivo, tan vendidos en las redes comerciales. No nos gustan. Por diversas razones -liquidez, rentabilidad, etcétera-, las alternativas anteriores resultan mucho más atractivas.