EL Íbex 35 cerró la sesión de ayer con un retroceso del 0,66%, lo que no le impidió alcanzar la cota psicológica de los 10.600 enteros (10.696,2) en una sesión marcada por la recogida de beneficios tras los máximos anuales del pasado viernes, además de por la tendencia negativa de la mayoría de plazas internacionales, entre ellas, Wall Street.

En el mercado de deuda, la prima de riesgo subió hasta los 164,3 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años en el 3,187%.

Pese terminar la sesión en negativo, el selectivo recortó su caída en el último tramo, dado que llegó a ceder cerca de un 1% a lo largo de la mañana. Se mantuvo, así, en línea con sus homólogas europeas: Fráncfort descendió un 2,05%, Londres un 1,15% y París un 1,14%. En el mercado de divisas, el euro se intercambió a 1,3740 dólares.

IAG lideró las pérdidas, convirtiéndose en el farolillo rojo de la jornada con una caída del 3,18%, seguido del Popular (-2,25%) y Jazztel (-1,98%). Por su parte, Inditex cedió un 1,98% e Indra un 1,97%.

El otro lado de la balanza lo ocuparon Gas Natural, el mejor valor de la sesión con un repunte del 1,48%, Red Eléctrica (+1,23%), Viscofan (+1,22%), FCC (+1,16%) y Técnicas Reunidas (+1,15%).

El signo negativo marcó la evolución de los grandes valores, ya que la mayoría cerró con pérdidas, salvo Telefónica, que consiguió aguantar el tipo y subir un 0,43%. Tras Inditex y BBVA se encontraron Santander (-0,75%), Repsol (-0,45%) e Iberdrola (-0,31%).

En el mercado continuo, Sotogrande fue la que más cayó, el 4,81%, mientras que por el contrario, Deoleo fue el valor con mayor ascenso, un 6,33%, después de que ayer el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, asegurase que "sí hay interés por parte del Gobierno" en tomar una "parte minoritaria" de la empresa española, la mayor vendedora de aceite del mundo.