EL presidente del Sevilla FC, José María del Nido, ha logrado un primer objetivo en su pertinaz lucha por cambiar el actual modelo de reparto de los derechos televisivos del fútbol español. Hoy se reunirán en la capital andaluza los dirigentes de la mayoría de los equipos de Primera División de la Liga, unidos por la disconformidad con la distribución de los ingresos que reciben del operador que televisa sus partidos y la necesidad de revisar los criterios vigentes de cara a futuros contratos. Se trata de criterios claramente injustos. En las competiciones más poderosas del fútbol europeo el reparto beneficia, como parece lógico, a los equipos más destacados, que son a su vez los que tienen más seguidores y aseguran una mayor audiencia cuando sus encuentros son televisados por las compañías que tienen los derechos correspondientes. El problema es que en la Liga española las diferencias entre lo que perciben los dos grandes, Madrid y Barcelona, y lo que llega a los demás equipos es abismal (por concretar: 140 millones de euros cada uno de ellos frente a 42 de los dos siguientes mejor retribuidos y cantidades muy inferiores para el resto). Dado que más de la mitad de los ingresos de cada club procede de los contratos de televisión -bastante por encima de los abonos, venta de entradas, patrocinios y marketing-, la consecuencia de este desequilibrio es que los dos equipos más poderosos lo son cada vez más, aumentando su distancia en recursos con respecto a los restantes. Se trata de una situación anómala y que tiende a empeorar. De alguna manera se adultera el espíritu de la competición, ya que los equipos medianos y modestos no pueden ni soñar con superar circunstancialmente a los dos grandes en materia de fichajes, por ejemplo, tan decisiva para escalar puestos en la tabla y proporcionar emoción y lucha hasta el final de cada temporada. Los cuatro equipos andaluces de Primera, Sevilla, Betis, Málaga y Granada, están objetivamente interesados en un cambio que habrá de producirse dentro de la Liga de Fútbol Profesional.