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Luis Carlos Peris

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Miguel Jones pudo ser el predecesor de Iñaki Williams

Un bilbaíno nacido en Guinea y de raza negra era impensable para el Athletic de los años 50

Sobrecoge el número de víctimas que se está cobrando el Covid-19 y en ese balance figuran muchos nombres conocidos. Lógicamente, el fútbol no podía quedar exento de esta broma macabra y desde Lorenzo Sanz a Goyo Benito, de Joaquín Peiró a Radomir Antic o a la madre de Guardiola, ayer surgía otro caído que salió mucho en las estampitas. Se trata del bilbaíno de Guinea Miguel Jones, un futbolista con una historia singular.

De raza negra, viendo ahora cómo deslumbra Iñaki Williams en las tardes de San Mamés, el recuerdo de Jones establece un nudo que conecta este tiempo con aquél de finales de los cincuenta y es la piel de ambos y cómo cambió la mentalidad. Jones era una de los pilares que formaron el mejor Indauchu de la historia y, con Arteche iniciando su decadencia, lo lógico es que hubiese recalado en San Mamés, pero acabó siendo el predecesor de Ufarte en el Atlético de Madrid.

En aquel gran Indauchu hubo varios futbolistas que no recalaron en San Mamés por circunstancias variopintas. El guardameta era José María Cobo, pero en el Athletic imperaba Carmelo y eso lo catapultó al Sevilla, como Axpe después. Isasi fue al Zaragoza por el tapón que suponía la sociedad Mauri-Maguregui, Ríos vino al Betis porque allí estaba Garay, el mejor central de entonces, mientras que Pereda fue al Madrid porque había nacido en Medina de Pomar (Burgos).

En Ibaigane siempre se ha proclamado que la raza no fue el impedimento para fichar a Jones, sino que su procedencia chocaba con la línea del club. Nunca se creyó ese argumento y hoy cuando vemos la importancia de Williams en el equipo caemos en la cuenta del cambio de mentalidad. Y ahora, la muerte de Miguel Jones nos transporta a un tiempo distinto, tan distinto que hubiera sido inimaginable ver de local en San Mamés a un Iñaki Williams en los cincuenta.

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