La OMS está en el punto de mira. Sus errores manifiestos en el inicio de la pandemia del coronavirus han favorecido que hubiera miles de muertos en todo el mundo. Sobre todo en países como España, que tiene a un coordinador de Emergencias llamado Fernando Simón, que seguía sus directrices sin atender las peculiaridades españolas, como el flujo de viajeros peligrosos. Además de que la directora de Salud Pública de la OMS es la asturiana María Neira, que apareció varias veces en los telediarios de febrero, diciendo que no había pandemia en el mundo. Negaron todo. También negaron la utilidad de las mascarillas y dijeron que bastaba con lavarse las manos.

Como el coronavirus se transmite en conversaciones, reuniones de grupos y cosas así, iba a sus anchas. Estos presuntos científicos demostraron no tener ni la más remota idea de lo que se les venía encima. Ahora se van conociendo más detalles. Maribel López, directora de ARCO, la Feria de Arte Contemporáneo, que se celebró en Madrid del 26 de febrero al 1 de marzo, con personas de diversos países, ha declarado que "el Ministerio y la OMS nos decían que fuéramos adelante". En Sevilla, íbamos de besamanos, y con el Vía Crucis del Señor de los Gitanos el 2 de marzo. Juan Espadas afirmó que la OMS lo debía convencer para suspender la Semana Santa. Y luego se oye que Dios no hace milagros.

Por aquellos días de febrero organizaron una reunión de expertos sanitarios de la UE, entre los que estaba Fernando Simón. En esa reunión, negaron que hubiera riesgo de pandemia en Europa, cuando en Alemania ya habían aparecido casos de coronavirus desde enero. Ahora dice Simón que no se subestimó, y dio excusas incomprensibles en la rueda de prensa. Sin embargo, en las actas publicadas, se ve el error imperdonable que cometieron.

Se han acostumbrado a negar las evidencias. En la OMS deberían rodar cabezas y echarlos a todos. En eso Donald Trump tiene razón. EEUU ha pagado 500 millones a una organización que se equivocó gravemente y no alertó a tiempo. Otra cosa es que Trump, como los políticos oportunistas, lo diga para salvarse él, que también se ha equivocado gravemente.

En el Véneto controlaron la pandemia, según el científico Sergio Romagnani porque hicieron lo contrario de lo que decía la OMS. Con test y otras medidas descubrieron mucho de lo que se sabe del coronavirus. Romagnani dijo que el problema consiste en que los directivos de la OMS no son científicos, sino burócratas y políticos. Igual que en España, donde han ido a ciegas, y siguen sin asumir su responsabilidad.