LOS máximos del petróleo y el impacto de la crisis en los resultados empresariales -la última víctima, Bank of America, ha anunciado un descenso de su beneficio del 77% en el primer trimestre- marcaron la tendencia de la sesión de ayer en bolsa. De hecho, en las principales plazas de Europa los inversores optaron por la recogida de beneficios, indiferentes ante el último informe del FMI, que insta al BCE a bajar los tipos para afrontar la desaceleración económica.

En el caso de España caló, además, el anuncio del Gobierno de que revisará a la baja las previsiones de crecimiento. Tanto es así, que el Ibex 35 se dejó un 1,41%, con 13.728,9 puntos. Menos acentuadas fueron las pérdidas en el resto de los parqués del Viejo Continente, con un 1,03% para el CAC 40 parisino, un 0,83% para el DAX de Fráncfort y un 0,06% para el FTSE 100 londinense.

De vuelta a la Bolsa española, sólo tres valores del selectivo acabaron en positivo: Mapfre, cuyas acciones se revalorizaron un 2,17%, Cintra (0,61%) y Sacyr (0,05%).

En el sector energético, Repsol cedió un 0,95%, mientras que Iberdrola, que confirmó los resultados del primer trimestre y su posible interés por British Energy, se dejó un 3,14%. La misma senda siguieron Endesa y Gas Natural, con sendas caídas del 0,15% y el 2,83%.

Entre los bancos también se impusieron los recortes. El Santander descendió un 1,09%, una proporción que fue del 1,84% para el BBVA y del 0,35% para el Popular. Bankinter cedió un 2,75%, lastrado por una rebaja de recomendación de JP Morgan para la banca mediana. Telefónica tampoco escapó a los números rojos, y se dejó un 1,11%, aunque las más castigadas fueron FCC (-3,60%) y Acerinox (-3,30%).

Lo que no dio tregua fue la cotización del euro y del petróleo. La divisa comunitaria se cambió a 1,5985 dólares, y el barril de Brent superó los 113 dólares.