Ecuador, o así, de la temporada de baños, que así es como antaño se calificaba al tiempo de las vacaciones en la playa. Temporada de baños y en los periódicos de la época se recogía en sus ecos de sociedad el flujo y el reflujo de la clase pudiente a las playas, principalmente a Chipiona. Tenían los periódicos sus espacios por los que los lectores sabían al día dónde estaban los señores de tal, si en Punta o en Mazagón, si en Regla o en la Puntilla, que por aquellos entonces aún no se había poblado Vistahermosa, esa finca de los Osborne que hogaño está con el no hay billetes perennemente colgado a la entrada. Y en estos días de después de la Virgen estamos atravesando el ecuador de esa temporada alta que tan detalladamente se recogía en los papeles de hace cuarenta años. Ecuador vacacional y lo que queda ya todo es camino de vuelta, absolutamente todo, porca miseria.