LUIS Fabiano, Kanoute, Chevantón, Kone, Dragutinovic, todos K.O. por culpa del que ha dado en llamarse Virus FIFA, o UEFA, qué más da. Ya, ya sé que el paulista no cayó con su selección sino entrenando con su equipo, el Sevilla, pero dicen los iniciados que su lesión fue como consecuencia del terreno que pisaba. Y el terreno que pisaba aquella tarde era el de una cancha sintética porque dos días después tenía el Sevilla que jugar un partido de Copa de la UEFA en un césped artificial. Por lo tanto, culpable de la lesión de Luis Fabiano es esa UEFA que permite jugar partidos por ella organizados en una pista que no es la habitual.

Demos, por tanto, que la lesión del depredador brasileño se ha originado por una arbitrariedad de la banda de Platini, ergo la causa de dicha patología es ese virus que trae a mal traer a los clubes, a esas instituciones que mantienen el circo y la competitividad de las competiciones con sus dineros y también sus deudas, para qué vamos a engañarnos. Lo demás no necesita explicación, Kone cayó para todo el curso con Costa de Marfil y ahora llegan noticias como que Chevantón tiene para semanas y Kanoute para unos días en que el Sevilla no podrá contar con él, por lo que un plantel perfectamente estructurado se queda sin delanteros a causa de dicho virus.

Y en la otra acera, ídem de lienzo. Emana y Mehmet están cada día más cargados, pero es que cada vez que Mark González atraviesa el charco se encienden velas por Heliópolis para que se haga el milagro de que vuelva sano. Con el chileno no más parece que descansa en el club que le paga para estar bien con su país y eso no parece correcto. Cierto es que ésa es la servidumbre que han de pagar los clubes con internacionales en sus plantillas de profesionales y que nadie le pone una pistola a nadie para que fiche a Fulano o a Mengano. Eso es así, pero también así debiera ser una colaboración de las federaciones con los clubes similar a la de éstos con las federaciones.