DERBI Betis y Sevilla ya velan armas para el derbi

Desde mi córner

Luis Carlos Peris

lcperis@diariodesevilla.es

En Valencia duermen con el enemigo

La destitución de un técnico en plena cresta de la ola es un hecho difícil de comprender

Qué barbaridad la situación del Valencia a causa de la irrupción en él de un magnate con el alma en otra parte. La destitución de Marcelino encabeza por el momento, sólo por el momento, la tabla que clasifica los disparates más disparatados de cuantos se han perpetrado en el planeta futbolístico. Y ojo a que es una situación que puede hacerse habitual como no se le ponga coto a la entrada en escena de ricos sin apego a la cosa.

Esta destitución del asturiano desvela cómo no es el éxito deportivo lo que persiguen estos capitalistas exóticos. Y la prueba es que a Marcelino le dan la patada cuando los éxitos deportivos siguen a buena temperatura. Con el equipo clasificado en Champions y la Copa del Rey ganada a Messi bien reluciente, el cese del entrenador se antoja espectacularmente inaudito. Y piensa uno lo que habrá tenido que soportar el pobre Marcelino cada vez que acudía a capítulo.

Me imagino a Marcelino con el corazón en un puño cada vez que, en compañía de Mateo Alemany, cruzaba los espacios del mundo para reunirse con el jefe en Singapur. Y pienso en la injusticia cometida con el competente técnico astur, un hombre que se irá llorando por tercera vez en su carrera. Así salió del Sevilla, a lágrima viva, así del Villarreal y así, pero con la estupefacción que proporciona lo incomprensible, de este Valencia convertido en el juguete de un caprichoso.

Convendría que se tomase buena nota de la conveniencia o inconveniencia de asirse a un capital exótico para sobrevivir. Aunque no suele escarmentarse en cabeza ajena, urge poner a remojo las barbas propias al ver cómo rapan las del vecino. Ya lo del Málaga demuestra que si al fútbol se le quita el fervor a unos colores no hay dinero que valga. Ahora bien, esto de echar a un entrenador en plena cresta de la ola triunfal es para pensar que se duerme con el enemigo.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios