Desde mi córner

Luis Carlos Peris

lcperis@diariodesevilla.es

Sobre un aparente impuesto revolucionario

La orden de Gobierno y Federación tiene cierto parecido a una mordida al fútbol profesional

Continuamos para bingo, que cualquier agarradero es bueno para paliar este tiempo de reclusión domiciliaria. ¿Y qué ocurre en el proceloso mundo del fútbol? Pues cosas que van de la poco rabiosa actualidad a los recordatorios de otro tiempo indudablemente más feliz. Por un lado, el impuesto revolucionario que tendrá que sufragar el fútbol profesional para que el negocio no se pare todo lo que nos tememos y fenezca por consunción.

Aunque suena muy fuerte, huele a chantaje lo que el Gobierno y la Federación, tal para cual, quieren sacarle al fútbol profesional para que tenga continuidad y las pérdidas no sean irreversiblemente trágicas. De aquella pipa de la paz fumada por Deportes, Federación y Liga se desprende que el daño económico de la pandemia recaerá exclusivamente en el fútbol profesional. Hay que apoquinar para que haya diligencia a la hora de reabrir el negocio y eso sabe a mordida.

Paralelamente siguen asomando la patita los que desean por todos los medios que la competición se dé por finalizada ya y hasta surgen veladas amenazas en forma de anuncio sobre qué pasaría si un solo futbolista da positivo por Covid-19. Y aquí llega el temor de que surja este perpetuo Rinconete y Cortadillo que se da en España para poner positivos a la carta. Y es que cómo vamos a descartar que la picaresca asome por debajo de la puerta o, incluso, dándole una coz a la puerta.

Puede ocurrir cualquier cosa, pero nadie que pase por la obra duda de que la competición doméstica debe rematarse. Mientras tanto, los futbolistas también opinan y la verdad es que la división es palmaria entre un rosario de opiniones. Lo habitual es arrimar el ascua a la sardina propia y que el que anda bien situado en la tabla clame en aras de que la salud es lo que importa para que el que aspira a algo mejor no dude en mostrar su deseo de que lo que se empieza se acabe.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios