EL Íbex 35 cerró la sesión de ayer con una subida del 1,78%, lo que permitió al selectivo quedarse a las puertas de los 8.800 enteros (8.764) y encadenar cinco jornadas en positivo gracias a la banca. Las pérdidas anuales se redujeron al 8,17%.

En el mercado de deuda, la prima de riesgo se colocó en 135,4 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años en el 1,561%. Mientras, en el mercado de divisas, el euro se intercambió a 1,0836 dólares.

Sabadell se consolidó como el mejor valor del selectivo con un repunte del 6,7%, seguido del Popular (+6,57%) y el Santander (+5,63%). BBVA, que avanzó un 4,42%, y FCC (+3,8%) completaron los cinco primeros puestos del ránking de ganancias.

Por el contrario, Acerinox se erigió como el farolillo rojo de la jornada con una caída del 2,55%, seguido de Mediaset (-1,78%), Enagás (-1,51%), Gamesa (-1,44%) y Red Eléctrica (-1,08%).

Dentro de los blue chips no se observó una tendencia homogénea y mientras Santander, BBVA, Telefónica (+3,19%) y Repsol (+3%) conservaron el positivo, Endesa (-0,8%), Iberdrola (-0,8%) e Inditex (-0,42%) no consiguieron aguantar el tipo.

De este modo, el selectivo español sacó ventaja a las principales plazas europeas, menos optimistas en la jornada de ayer: Fráncfort se revalorizó un 0,61%, París un 0,41% y Londres cedió un 0,09%. El estratega de mercados de IG Daniel Pingarrón considera que las bolsas del Viejo Continente no supieron aprovechar el tirón de Wall Street y de las plazas asiáticas, un comportamiento al que tampoco ayudó el petróleo y el euro.

En el Mercado Continuo se negociaron casi 2.600 millones de euros y de sus empresas destacó el alza del 14,65% de Abengoa A, después de que la compañía cambiara de presidente y la bajada del 7,99% de GE Inversión.