"Ahora estoy empezando realmente mi carrera como músico", reconocía de forma humilde este compositor de Guinea Bissau que lleva más de 20 años asentado en España y con cuatro discos a su espalda. Hace poco sacó el cuarto de ellos, Olyly, el primero con su nuevo grupo y con el sello MAM, el cual será presentado el próximo miércoles 22 en la sala Malandar. En Sevilla lleva viviendo varios años, aunque también lo hizo en Barcelona y en Portugal tras abandonar a mediados de los 80 su país de origen, donde comenzó su relación con la música dentro de una familia con tradición. "Mi hijo, de 17 años, también toca el bajo", comenta Simao Félix, quien explica su historia con la frase: "Me gusta simplemente tocar". Con 44 años y una amplia experiencia tocando sus ritmos africanos con distintos artistas, apunta lo "difícil" de ser cantautor y que "si imitara a alguien sería mejor". "Otros grupos me dicen que hay que hacer versiones, porque es más complicado ser tú mismo que imitar, pero yo intento abrirme un hueco con discos como éste, que se acerca a lo que siempre he querido", añade Simao Félix, cuyo último disco contiene canciones de protesta sobre la situación de su país y de otros africanos, además de otras letras más románticas "con palabras de amor". Este músico guineano describe la dificultad de encontrar conciertos sin tener agente, aunque aspira a participar en festivales por toda España llevando sus ritmos de fusión afro-funk.

En la ciudad hay muchísimas placas de regulación del tráfico que se encuentran en estado de reposición o arreglo, lo que conduce únicamente a confundir a conductores o peatones. Ésta de la imagen es un claro ejemplo.

La Iglesia católica celebra el Día Mundial de la Propagación de la Fe (Domund), jornada dentro del Octubre Misionero, labor para la cual se organiza esta fiesta con el objetivo de fomentar el espíritu misionero y ayudar a sus obras.