EL Íbex 35 volvió a cerrar en negativo arrastrado por la decisión del BCE de mantener los tipos de interés en el 4,25% y por el hecho de que Wall Street abriera en rojo. El selectivo español no recibió de buen grado la prudencia de Jean-Claude Trichet y se dejó llevar por el pesimismo de las bolsas norteamericanas. Además, el petróleo, que en la víspera bajaba de los 117 dólares, volvió a subir de precio y se situó por encima de los 118 dólares (el Brent) y de los 120 dólares en el caso del de Texas.

El mercado de renta variable español fue el peor parado de las bolsas europeas, aunque todas se movieron en márgenes similares. París fue la única que subió, un 0,29%, mientras que Fráncfort se dejó un 0,27% y Londres un 0,16% en el día en que el Banco de Inglaterra se sumaba a la decisión del BCE de mantener los tipos en el 5%.

Dentro del mercado de referencia español, Acciona lideró la tabla con una subida del 5,55%, seguida de Ferrovial, gracias a la noticia de la víspera de que los bonistas de su filial de gestión aeroportuaria BAA habían aprobado el plan de reestructuración anunciado por la compañía. De hecho, la empresa de Rafael del Pino llegó a situarse por encima del 8% a lo largo de la sesión. El tercer puesto recayó en Endesa, gracias a que el broker francés Cheuvreux mejorara su recomendación, reiterando su precio objetivo de 35,4 euros.

Por abajo, Iberia, afectada por el repunte del crudo, sufrió pérdidas del 3,77%, al tiempo que BME se asentaba también entre los peores del día con un 2,78% en negativo.

Los grandes no fueron capaces de salvar el día: Telefónica perdió un 1,84% y Santander cedió un 1,79%. BBVA se dejó un 0,93%, mientras que Repsol acabó en tablas (0,05%) e Iberdrola fue, de entre los grandes, el único que cerró en verde con un alza del 1,19%.

En el mercado de divisas, el euro cedió hasta los 1,5420 dólares.

-Iberia, afectada por el crudo, sufrió pérdidas del 3,77%