EL Íbex 35 cerró la sesión de ayer con un avance del 0,38%, lo que llevó al selectivo a situarse en los 9.600 puntos y a sumar un avance semanal del 0,88%.

En el mercado de deuda, la prima de riesgo se colocó en 127,6 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años en el 1,784%. En el mercado de divisas, el euro se intercambió a 1,1272 dólares.

ArcelorMittal se consolidó como el mejor valor de la jornada con un avance del 6,7%, seguido de Sacyr (+3,2%), DIA (+2,7%), Acerinox (+2,5%) y Repsol (+2,3%).

La otra cara de la moneda la mostraron IAG, farolillo rojo con un recorte del 1,89%, seguido de BBVA (-1%), Bankinter (-0,7%), Telefónica (-0,5%), Ferrovial (-0,46%) y Aena (-0,44%).

Salvo BBVA y Telefónica, los grandes valores aguantaron el tipo y sumar ganancias que oscilaron entre el 2,3% de Repsol y el 0,1% de Inditex. Iberdrola repuntó un 1,11%, Endesa un 0,8% y Santander un 0,7%.

El selectivo comenzó la jornada con subidas cercanas al 1% y mantuvo ese impulso hasta que se conoció el dato de paro de EEUU, algo peor de lo esperado, lo que hizo virar el índice a la baja. Esta caída se vio agravada con la mala apertura de Wall Street. Sin embargo, el Íbex logró retornar al positivo al cierre de sesión.

Lo mismo sucedió con las principales plazas europeas, que terminaron en verde: Londres subió un 0,9%, París un 0,6% y Londres un 0,34%.

El departamento de análisis de Selfbank explica que las cifras de empleo de EEUU extendieron el pesimismo en las bolsas y provocaron que el dólar "perdiese fuelle", ya que "hay menos argumentos para que la Reserva Federal suba los tipos".

El analista de XTB Javier Urones indica que la evolución del Íbex a lo largo de la última semana deja claro que el índice se mueve "sin un rumbo claro". "Lo positivo para nuestro selectivo es que aún en zona de mínimos no ha llegado a romper los límites de la semana pasada (9.200 puntos)", apunta.