La aldaba

Carlos Navarro Antolín

cnavarro@diariodesevilla.es

¿Dónde está el juez Francisco Serrano?

Alguien de Vox en Madrid debería pensar en un destino para un icono que lleva un año orillado

Usado como ariete andaluz en los tiempos de dificultad, cuando urgía derribar los muros de la indiferencia. Empleado como cabeza de cartel, cuando la inmensa mayoría de los miembros del partido eran y siguen siendo unos perfectos desconocidos. Y orillado a las primeras de cambio, como cuando un entrenador saca del terreno de juego a un futbolista en la primera parte. El mensaje es claro, muy claro, cuando no se guarda el mínimo decoro de aguardar al comienzo de la segunda parte, a esperar a la mitad de la legislatura, a aguardar que haya otras elecciones donde ser mejor colocado.

La política no es joven ni vieja, ni nueva ni antigua. Los modos son siempre los mismos. Alguien conquista y otros gobiernan. Unos tiran los muros para que otros entren. Unos alzan la voz para concitar la atención y otros salen en la foto. El juez Francisco Serrano fue incluido en la encuesta del Centro de Estudios de Andalucía, el CIS del Sur pero sin Tezanos. En realidad no se entiende que el magistrado fuera incluido, pues dejó de ser el líder del partido en la práctica hace ya un año. Serrano es un icono de los comienzos de una formación como Vox que irrumpió en el panorama electoral el 2 de diciembre de 2018.

Le dejaron todo el protagonismo en la investidura del presidente Moreno, pero poco más. Si se conoce un poco el perfil de este jurista desde una posición libre de prejuicios, se entenderá que no está hecho para la vida interna de ningún partido, para corsés ni consignas. No es hombre de calle, ni de intrigas, ni mucho menos de tácticas marquetinianas. Pocos recuerdan que en su día colaboró con el PSOE, siendo un magistrado polémico por libre, y libre por convicción. Lo vimos en un congreso del PP en Fibes y premiado por asociaciones de mujeres al ser en primero en aplicar órdenes de alejamiento.

¿Pero dónde está hoy tras ser la imagen de la llave que hizo posible el cambio en Andalucía? Vox, como todos los partidos al alza, está viviendo su propia transformación interna, el reposicionamiento de sus miembros, los pulsos de quienes intentan mangonear desde fuera de las listas a los que están en las instituciones, etcétera. Y Serrano sencillamente no sabe jugar a ese parchís por la loseta de poder. Está desubicado pero comprometido con la política. No es un personaje de aparato, sino de despacho. Alguien en la sede de Madrid debería pensar ya en una solución para quien representa el éxito inicial de un partido que en Andalucía muestra su cara más amable. A Serrano le encanta sentirse libre al opinar (y tuitear) y eso supone un problema y un riesgo. Intuimos que a Serrano no le gustó nada que lo sacaran a los quince minutos del partido.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios