Huele el mar, siente el cielo y deja volar tu alma y tu espíritu es una de las muchas sentencias que se dejan caer cuando al llegar la madrugada arranca la noche de San Juan. Acto plagado de rituales con los que atraer la suerte en la celebración de una noche mágica, la más corta del año, y que está encaminado a alejar todo lo malo a la vez de atraer una energía positiva para lo que está por venir. Es como el kilómetro Cero de una etapa de prosperidad y que tiene su origen en una fiesta pagana alrededor del culto al astro rey. Esta noche es de indudable importancia en nuestras costas, especialmente las levantinas con sus célebres hogueras. La alicantina playa de San Juan es un punto clave en esta noche tan llena de rituales, todos encaminados a sacar el mal rollo de nuestras vidas y acaparar toda la energía positiva que emana del solsticio de verano. Feliz fiesta.