EL Íbex cerró la sesión con una caída del 0,85% que le sitúa en la cota de los 9.037,7 puntos, nuevo nivel mínimo desde junio de 2010 y suma cuatro sesiones consecutivas de descensos, en las que el selectivo se ha dejado un 6,4%.

Pese a un arranque prometedor, el selectivo salvó in extremis los 9.000 puntos tras cotizar minutos antes del cierre por debajo de este nivel. Los malos datos procedentes de EEUU y el tono negativo de Wall Street volvieron a lastrar a los mercados europeos.

Los mayores descensos del día correspondieron a ArcelorMittal (-5,62%), Abertis (-3,85%), IAG (-3,6%) y Técnicas Reunidas (-2,38%). En el sector financiero, CaixaBank cedió un 1,82%, seguido de Bankinter (-1,25%), el Santander (-1,22%), Banco Sabadell (-0,95%) y el BBVA (-0,82%). En el mercado continuo, Bankia y Banca Cívica también cerraron en negativo, con recortes del 3,85% y del 1,4%.

Repsol YPF, por su parte, cayó un 1,44% y Telefónica terminó plana. En el lado positivo se colocaron Gamesa (+0,69%), Endesa y Ferrovial (+0,43%), Gas Natural (+0,29%), Iberdrola (+0,2%), FCC (+0,11%) y Banco Popular (+0,09%).

En Europa, los principales indicadores también cerraron con signo negativo. Fráncfort lideró las caídas, con un 2,41%, seguida de Londres (-2,34%), París (-1,93%), Milán (-1,5%) y Lisboa (-1,33%).

Los inversores han vuelto a deshacer posiciones tras conocerse que el indicador de actividad del sector servicios de EEUU se situó en julio en el 52,7%, frente al 53,3% registrado en junio, lo que supone la lectura más baja del índice elaborado por el Instituto de Gestión de la Oferta (ISM por su sigla en inglés).

En el mercado de divisas, el euro gana posiciones frente al dólar y al cierre de la sesión el cambio entre las dos monedas quedaba fijado en 1,4317 unidades.