EL mandato municipal se estrenó con austeridad. No podía ser de otra forma. Y unas primeras medidas del gobierno de Zoido fue recortar gastos, entre ellos, el número de coches oficiales al servicio de la corporación. Al PSOE, en la oposición, le tocó en suerte un vehículo, que sus concejales deben repartirse como hermanos. Pero siempre hay alguno que saca los pies del tiesto y se lleva la mejor parte, ocurre en todas las familias. Entre los socialistas el coche se lo rifan al parecer dos de los ediles y ninguno es precisamente el portavoz. Incluso alguna que otra funcionaria está quejosa por el asunto. Es lo que hay.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios