Después de dos semanas de abundantes noticias sobre los problemas del cambio climático, por la cumbre celebrada en Madrid, apenas nos han llegado comentarios sobre cómo debe ser el transporte para ese mundo mejor. Para la vertebración de Europa y la movilidad en sus ciudades creemos que la solución al transporte colectivo es el ferrocarril. Urbano, metropolitano, regional y enlazando países. Como el Eurostar que, a pesar del Brexit, seguirá uniendo París y Londres en dos horas.

Los trenes vienen del pasado, pero con los avances tecnológicos, generación limpia de electricidad, pilas de hidrógeno, etcétera, resolverán la movilidad del futuro. La alta velocidad fue un cambio radical y ahora los trenes de levitación magnética circularán a más de 450 km/h, como el de Shanghái. Sostenible, competitivo y eficiente. En los últimos años el consumo de energía del transporte por ferrocarril ha disminuido un 22%. La digitalización permitirá que los vagones se configuren según el número de viajeros y sus necesidades concretas. Para viajes de hasta mil kilómetros el doble de personas ya prefieren un ferrocarril de alta velocidad que un avión.

Y ese tren, nunca mejor dicho, lo estamos perdiendo en Andalucía. La falta de funcionalidad de nuestra red de ferrocarril la compensábamos en parte con los trenes Ave Sevilla-Madrid y Málaga-Madrid y la parada en Córdoba. Pero ya ni eso. El nuevo AVE de bajo coste ya no empieza en el Sur, sino que mejorará el corredor Madrid-Barcelona y ciudades intermedias. A continuación, y según funcione, vendrá el corredor de Levante y después el de Andalucía. ¡Qué mal suena la palabra después en estas cosas! Ya veremos los servicios que prestan en Andalucía las nuevas compañías francesas e italianas que entrarán en juego a finales del año próximo.

Porque la tozuda realidad es que las capitales andaluzas están muy mal comunicadas por tren. ¿Han intentado ustedes ir en tren desde Sevilla al resto de las capitales andaluzas? Pues ya saben de qué hablo. A Granada y Almería no se puede ir en este momento y desde hace años. Porque subirse a un tren en Santa Justa, bajarse en Osuna y subirse a un autobús hasta Granada con transbordo en Antequera Santa Ana, no creo que a eso se le pueda llamar viajar en tren y menos con un par de maletas. Y si vas a Almería el trayecto entre Huércal-Viator y Almería es en autobús. Como diría el humorista, si hay que ir se va, pero vaya manera de viajar en tren. A Huelva y a Jaén es escaso y anticuado. Y no sigo. La finalización de las obras, cuando hay obras, se aplazan y se aplazan.

Y todo eso desde Sevilla, porque para ir de Cádiz a Huelva, por ejemplo, ni les cuento. Y en este caso no hay ni buena conexión por carretera. Y aún seguimos discutiendo entre nosotros sobre si túneles o puentes para pasar el río en la SE-40. Increíble. Que se realice de una vez lo proyectado, por favor. Porque cambiar lo planificado, siempre tiene un costo mayor en tiempo, que también es dinero.