Algunos medios de comunicación nos están bombardeando con todo lo excelente de este Gobierno socialcomunista y todos los partidos de izquierda asumen que todo es cierto. Pero los ciudadanos que no estamos de acuerdo con este (des)Gobierno, que somos la mayoría, tenemos una desconfianza en el futuro inmediato que pesa más sobre todo entre los empresarios españoles y los trabajadores.

La política socialcomunista sigue haciendo mella en los tejidos productivos y el 27% de las empresas están convencidas de que su actividad va empeorando por días. Los radicales viven en un mundo ficticio e ignoran que las medidas fiscales que prometió Pablo Iglesias no pueden ser tan revolucionarias, porque si el Gobierno sube mucho los impuestos corre el riesgo de ahuyentar la economía, dando al traste con las intenciones de recaudar más.

Creo que el Gobierno va en el camino contrario en todo lo que necesitan los españoles. Aumentar impuestos para financiar el gasto público es una locura. España, señores del nefasto Gobierno, es uno de los países con la economía más afectada por la pandemia y las medidas de confinamientos. Sean inteligentes y sáquennos de este abismo sin salida.