Una sevillana popular dice: “Pasa la vida y no has notado que has vivido cuando pasa la vida”. Y cierto es que ya van dos años sin farolillos, trajes de gitanas, albero, coches de caballos, las lanzaderas a la Feria, las colas interminables de taxis, el rebujito, las quedadas en la portada, la peculiar musicalidad de las casetas que se entrecruza ante tu caminar por el real, el estruendoso ruido de la Calle del Infierno...

Todo nos hace pensar que una vez más nos toca vivir del recuerdo, de esa vida anterior a la pandemia, pero no. ¡Estamos en Feria! Y desde aquí te hago una petición de la mano de los Cantores de Híspalis: “A bailar, a bailar y a bailar, alegres sevillanas, todo el mundo a bailar”. Toca vivirla diferente, con mascarilla, distancia y en grupos reducidos, pero no de no vivirla.