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En estos días difíciles del comienzo de curso, parece que en lo único que estamos todos de acuerdo es en la necesidad de una escuela presencial, imprescindible después de tantos días sin presencialidad y socialización escolar. Los docentes harán un gran esfuerzo, no lo dudo. Después de 32 años como profesora de Secundaria conozco bien este cuerpo, pero al docente se le pide lo imposible: que evite los contactos, que imparta las programaciones de este curso, que supere el desfase del curso anterior, que regule el uso de mascarillas, que desinfecte mesas y pupitres, que ponga gel a los niños, que organice los centros…

¿Y contarán con ayuda? ¿Alguien habla de esto? La Consejería de Educación sólo ofrece uno o dos profesores por centro. En realidad lo que la Administración propone a las familias realmente no es una ayuda y plantea también reducir horarios. Eso es mermar el derecho a la educación tras el desfase del curso anterior y también sabe que se irán cerrando centros poco a poco. Hablemos claro a las familias, a las AMPA.

Vamos a ser serios. En un centro no es todo meter al alumnado en una clase y que se queden sentados, sin moverse, sin contacto, son muchas las situaciones que conlleva el periodo escolar; los niños corren, juegan, se tocan en los recreos. Lo que se necesita en los centros es personal de ayuda real con el alumnado: mucha ayuda en los recreos, en los pasillos para las entradas y salidas de las clases, ayuda para atender al alumnado si se cae, llevarlos al servicio, cambiar mascarillas, atenderlos si se encuentran mal, regular esas salidas del centro cuando los abuelos están esperando para recoger a sus nietos.

¿Esto también recaerá en los docentes? ¿Y los IES? ¿Sabe alguien lo que es controlar a 400-500 adolescentes en un centro cerrado, cuando los estamos viendo en las calles sin mucha conciencia de lo que tenemos encima? ¿De nuevo la solución será que no vayan a los centros? ¿Y las prácticas de FP?

La Administración cuenta con otros profesionales en la docencia de los que no habla, pero existen. Se trata del personal que llaman PTI, Técnicos en Integración Social. Tienen formación para esas tareas de ayuda, algunos ya tienen experiencia en todo esto, pocos, porque no creo que lleguen a 30-40 centros por provincia los que los tienen. Ahora se necesita por lo menos uno por centro.

Que contraten ante todo a los que ya cuenten con alguna experiencia en los centros. Creo que es un personal que las AMPA deberían pedir. Si se han contratado 3.000 vigilantes en las playas, ¿la escuela no ? 

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