El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Alcalá de Guadaíra ha desestimado la demanda de una mujer que reclamaba más de 40.000 euros a Emasesa por una caída que sufrió en una obra del citado municipio, pues no ha quedado probado que la obra no estuviera debidamente señalizada. 

La sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press, recoge que M.A.M.G. asegura que el 28 de mayo de 2004 "sufrió una caída como consecuencia de una chapa metálica" que tapaba una zanja de una obra que "no contaba con señalización ni con ninguna medida de seguridad". 

El juez entiende que en este caso "no puede presumirse la culpa del demandado ante la producción del resultado lesivo" pues "no es suficiente con que se cause un daño para que de manera automática haya que responder" ante esta circunstancia. 

Por ello, la sentencia explica que a pesar de que haya quedado acreditado por informes médicos que la demandante sufrió una caída, "no existe indicio alguno" para demostrar que el accidente se produjo tal y como dice M.A.M.G., cuyas palabras contrastan además con las de un testigo que dijo que "la obra estaba suficientemente señalizada, tenía una vaya, una chapa y sus luces". 

Después de la desestimación de la demanda, la afectada recurrió el fallo ante la Audiencia Provincial, que confirmó la sentencia de primera instancia al entender que la resolución inicial no niega la existencia de las obras ni de la caída, sino que la absolución vino dada por "falta de pruebas", pues la demandada no acreditó "cómo fue el mecanismo de la caída, así como el hecho de la falta de señalización, ni siquiera que se cayera en la obra propiamente".