Trabajadores y familiares de ancianos ingresados en la residencia pública de Montequinto, que cerrará a finales de año, han presentado una queja en el Defensor del Pueblo contra la clausura de este punto asistencial, en la que piden la mediación de José Chamizo para tratar de impedirlo.

La Delegación para la Igualdad y Bienestar Social tiene previsto trasladar a los 184 ancianos ingresados, que son personas grandes dependientes, a otros centros: a la residencia de reciente construcción en Dos Hermanas que es de titularidad municipal; y a los otros dos puntos asistenciales que tiene la Junta de Andalucía en Heliolópolis y Marchena. Desde que se conocieron estos cambios el pasado verano, tanto los trabajadores como los familiares de los ancianos ingresado han mostrado un rechazo frontal a la clausura de la residencia de Montequinto, que hasta ahora es el centro con mayor capacidad en toda la provincia para atender a personas muy dependientes, entre ellos, graves enfermos mentales, al albergar 205 plazas públicas. En la queja presentada en la oficina del Defensor del Pueblo, los afectados denuncian que "el traslado es claramente insuficiente, ya que la residencia de Dos Hermanas es más pequeña que la de Montequinto; y la de Heliópolis es una residencia destinada a personas válidas, por lo que no está preparada para recibir a personas con minusvalía".

En el escrito, los afectados piden al Defensor que "disponga lo necesario a fin de que no procedan al cierre de la residencia para la tercera edad de Montequinto, sin perjuicio de que se proceda a construir una nueva residencia, que incremente el número de plazas destinadas a estas personas". Para apoyar esta iniciativa han presentado 10.000 firmas.

El traslado de los ancianos de Montequinto será, en principio, provisional mientras se construye una nueva residencia prevista desde hace años en terrenos de Dos Hermanas. La Junta de Andalucía ya apuntó a 2013 como la fecha para la apertura de las nuevas instalaciones que sustituirán a las actuales, que, según la Administración, se han quedado obsoletas, pese a las recientes reformas ejecutadas.