La Guardia Civil ha desarticulado en Utrera una organización dedicada a la venta de cocaína tras detener a diez personas pertenecientes a una misma familia, y ha desmantelado tres puntos de venta de esta droga.

Tras una investigación que ha durado varios meses, la llamada operación Hundido ha culminado con la detención de diez personas y la intervención de distintas cantidades de droga.

Según un comunicado del instituto armado, los agentes realizaron registros en cinco viviendas, en las que han intervenido medio kilo de cocaína de gran pureza, 20 gramos de hachís, útiles para la preparación y distribución de la droga, varias básculas de precisión y 2.600 euros.

La organización, compuesta en su totalidad por un clan familiar, estaba perfectamente estructurada y operaba con un definido reparto de funciones entre sus miembros, según explica la nota.

Así, se proveían de cocaína de gran pureza, que posteriormente cortaban y preparaban para su distribución a menor escala en un domicilio, mientras que los otros dos puntos de venta de cocaína operaban independientes y con un nivel más básico.

Con esta operación han quedado desmantelados tres puntos de venta al que acudían bastantes consumidores, lo que generaba gran preocupación y alarma social entre los vecinos.

Los detenidos, junto a la droga y demás efectos intervenidos, han sido puestos a disposición del Juzgado de guardia de los de Utrera.