El presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, aseguró ayer que su gobierno intentará sacar adelante un plan extraordinario de empleo si el nuevo gobierno central del PP amplía a diez años el plazo para la devolución de las deudas por las liquidaciones negativas que la institución obtuvo en los Presupuestos de 2008 y 2009. El compromiso se produjo tras el Pleno en el que el PSOE sacó adelante en solitario unos presupuestos para 2012 y que han suscitado un frontal rechazo del PP e IU. Los 18 alcaldes de esta formación en la provincia, junto a simpatizantes, se manifestaron durante la sesión porque consideran que los recortes van a repercutir negativamente los pueblos. En concreto, el presupuesto de la Diputación para 2012 será de 320,1 millones de euros, sin contar con los organismos autónomos y, según el gobierno, tiene como objetivos el mantenimiento de la política social y la creación de empleo.