Las secuelas del congreso del PP de Sevilla, en el que se enfrentaron las candidaturas de Juan Bueno y Virginia Pérez, que terminó siendo elegida presidenta, siguen evidenciándose en la provincia. Ocurrió ayer en el Pleno del Ayuntamiento de Dos Hermanas, en el que el grupo comunicó que dejaba a uno de sus ediles, Luis Gómez, sin la liberación parcial que tenía y reducía el número de comisiones en las que le representa. El afectado, que apoyó a Juan Bueno en el congreso, se mostró en desacuerdo con la propuesta y anunció un recurso de reposición. Se basa en que en su día se acordó en el grupo que la portavocía sería rotativa y cambiaría cada año y la edil Mari Carmen Espada, que la ostenta, lleva más tiempo y no puede tomar esas decisiones.

Los otros dos ediles del grupo defienden que se trata de una "decisión interna", que se ha estimado oportuna en este momento, en tanto que Gómez hace "vida independiente" y no va por el Ayuntamiento y quisieron desvincular las desavencias con lo ocurrido en el último congreso provincial.

Se confirma en cualquier caso una nueva grieta en el seno del PP en Dos Hermanas, donde el partido sacó sólo cuatro ediles en 2015. De la formación ya salió Cristina Alonso, la candidata a la Alcaldía, que es edil no adscrita y que denunció una campaña de acoso. Luis Gómez apuntó tras el Pleno que lo que se pretende con la decisión de dejarle sin asignaciones es que pase a edil no adscrito. Como concejal del PP sigue, además de Espada, Luis Paniagua, vicesecretario del PP de Sevilla y una de las personas de confianza de Virginia Pérez, que preside la comisión gestora que se creó en el PP nazareno tras la renuncia al cargo del último presidente local, Manuel Alcocer. Algunas fuentes apuntan que los problemas se han recrudecido por la cercanía del congreso local en el que se debe elegir la ejecutiva. Estas diferencias entre concejales del PP afines a Juan Bueno y Virginia Pérez han dividido también al PP en Palomares, donde gobierna, pero ahora lo hace sólo con dos concejales de cinco.