Miles de personas acudieron ayer por la mañana a la tradicional romería de la Virgen de Valme, que recorre cada año la distancia que separa la parroquia de Santa María Magdalena en Dos Hermanas y la ermita del Cortijo de Cuarto.

La novedad más destacada de este año fue la presencia del cardenal de Sevilla, Carlos Amigo Vallejo, en la tempranera misa de romeros, así como en el inicio de la procesión, que se desarrolló a lo largo de la mañana sin incidentes destacados, como comenta el hermano mayor de la hermandad de Valme, José Ramón Gómez Tinoco, que calificó la procesión como "apoteósica", a la vez que apuntó el mayor número de asistentes respecto a las celebraciones de años anteriores.

La Virgen de Valme comenzó su peregrinaje a las 8:00 para llegar a la ermita en el Cortijo Cuarto a las 14:00. La lluvia que se presentó de improviso por la tarde no afectó al regreso de la procesión a Dos Hermanas, ya que el grueso de la tormenta se produjo cuando los romeros aún continuaban en el cortijo. Además, unos 1.500 caballistas se calcula que acompañaron a la virgen nazarena.