Tres nuevas sentencias de juzgados penales de Sevilla han ordenado derribar construcciones ilegales en suelos no urbanizables, en contra de la doctrina imperante hasta ahora, que sólo imponía reponer el suelo a su estado original si el caso llegaba en apelación a la Audiencia. Según explicaron a Efe fuentes judiciales, se trata de dos sentencias contra otros tantos propietarios de Las Minas de Castilblanco y otra contra el dueño de una casa en el paraje La Lapa de Arahal que han sido condenados, junto a la pena de cárcel, a demoler las edificaciones.
En cuanto a Las Minas, los juzgados han resuelto que no existió un error por parte de los particulares, pues ni pidieron licencia ni se asesoraron en el Ayuntamiento. Lo mismo ocurrió con el propietario de Arahal, quien además desobedeció varias órdenes de paralización.
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