Los trabajadores de la empresa Cerámicas Bellavista, perteneciente a Roca, inician hoy una ronda de conversaciones con los ayuntamientos de la provincia y con la Diputación Provincial para buscar apoyos a su causa. La firma prevé poner en marcha para el 80% de la plantilla un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afecta a 191 empleados de los 242 que tiene en plantilla.

El presidente del comité de empresa, Carlos Cortés, explicó que entre las corporaciones locales contactadas se encuentran las de Los Palacios y Villafranca -que abrirá hoy a las 12:00 la ronda de contactos-, Alcalá de Guadaíra y San Juan de Aznalfarache, así como la propia Diputación Provincial. Cortés explicó que el comité de empresa mantendrá una reunión a partir de las 10:00 con el fin de valorar posibles movilizaciones, después del encierro protagonizado el pasado viernes en las instalaciones de la planta de Dos Hermanas.

El encierro, según sostuvo el presidente del comité de empresa, fue "involuntario", dado que, según la versión de los trabajadores, éstos quedaron encerrados más de dos horas, mientras permanecían en la asamblea, después de que "unos encapuchados soldaran" las puertas de las instalaciones y "prendieran fuego" a varios neumáticos y cajas a la entrada del recinto .

La empresa anunció el día 20 de noviembre que traspasará toda su producción de porcelana sanitaria de su planta de Dos Hermanas a otra ubicada en Alcalá de Guadaíra. Cerámicas Bellavista mantendrá en la planta de Dos Hermanas sus oficinas, almacén y centro logístico para seguir realizando las tareas de comercialización y distribución habituales.

La empresa defendió que la previsión es que esta situación "continúe durante varios años más" puesto que "no es un problema meramente coyuntural, sino de cambio de ciclo económico" y añadió que la disminución del consumo y la crisis de la construcción "ha provocado un constante descenso de las ventas, generando un volumen de stock insostenible".

Para hacer frente al "desfase entre ventas y producción", la empresa redujo el programa de producción para reajustarlo a las necesidades de ventas actuales y previstas para los próximos años, "que van a ser muy inferiores a las de ejercicios anteriores".